Índice
En esta página exponemos las principales características, clasificación y hábitat del orden helioporacea, englobando la máxima información de los mismos.
Helioporacea | Características y clasificación del orden helioporacea
Definición de Helioporacea y etimología
La etimología y definición de esta palabra: Helioporacea se basa en el desglose de la misma, separando el prefijo Helio- y el sufijo –poracea. Helios en griego es «Ἥλιος» y significa «sol»; poracea también proviene del griego y significa «poro con forma». Definitivamente el significado completo de la palabra será: «poro con forma de sol».
Características de Helioporacea
Actualmente el orden Helioporacea taxonómicamente se compone de dos familias contemplando aproximadamente 4 géneros y dentro de todos ellos, la totalidad de especies que comprenden son un cómputo de seis. Al contrario que la mayoría de órdenes, a éste en particular no le sigue ningún diminutivo, con lo que únicamente estos animales se conocen como helioporacea.
El orden Helioporacea pertenece a la Subclase Octocorallia encontrada a su vez dentro de la Clase Anthozoa y ésta formando parte de el Filo Cnidaria, por tanto al Reino Animalia.
Las principales características del orden Helioporacea se fundamentan en la formación de un esqueleto calcáreo cristalino, además están lobulados y se encuentran de manera invasora en muchos corales coloniales. Otra de las características es la carencia de espículas, cristales formados por calcita y espinosos; los organismos helioporacea se consideran los únicos octocorales que son capaces de formar un esqueleto de fibrocrystalline aragonita laminar. Forman parte de colonias que pueden llegar a medir más de un metro en cuanto a su diámetro.
Morfológicamente, los animales helioporacea conforman ramas verticales conocidas como folias. La mayoría de las especies de este orden se componen de un esqueleto normalmente de apariencia uniforme y suave, recubierto por infinidad de pólipos individuales. Estos pólipos están compuestos por ocho tentáculos de carácter plumosos, recubiertos de espículas formando una capa de protección en cada uno de ellos.
El orden helioporacea está dotada de una cavidad gastrovascular formada por ocho septos; en seis de dichos septos se encontrarán una serie de cilios, encargados de llevar agua a la cavidad gastrovascular, y los septos restantes estarán involucrados en la expulsión de dicha agua.
aparato digestivo
El aparato digestivo de los organismos helioporacea es completo, ya que se conforman de una boca, la tráquea, una cavidad gastrovascular, filamentos digestivos y un ano.
La boca tiene forma circular y se rodea de ocho tentáculos unidos a la faringe ectodérmica, la cual se conforma de unos cilios que permiten el desplazamiento del bolo alimenticio hacia la cavidad gastrovascular. Esta última parte del cuerpo del animal hace las funciones estomacales, absorbiendo los nutrientes y enviándolos a la superficie completa del cuerpo mediante unos canales específicos. En el momento en que el alimento no tiene más nutrientes esenciales que absorber por el organismos helioporacea, se expulsará por el mismo orificio por dónde fue ingerido, es decir, por la boca, pero esta vez ejerciendo de ano.
sistema nervioso
El sistema nervioso de Helioporacea se constituye por una serie estructuras celulares nerviosas las cuáles se agrupan formando redes, extendidas a lo largo de todo el cuerpo de cada uno de los pólipos de manera longitudinal.
Las células nerviosas del orden Helioporacea tienen un tamaño extremadamente pequeño, por lo que los estímulos se reciben de manera muy lenta y corta, conformando el sistema nervioso de manera simple y primitiva.
aparato respiratorio
Los organismos helioporacea no constituyen un aparato respiratorio verdadero, ya que la respiración se produce mediante la difusión, como pasa en todos los animales que conforman los octocorales.
La difusión producida en los organismos del orden Helioporacea se basa en una serie de poros acompañados de canales, recubriendo todo el cuerpo del animal, por dónde se produce la entrada del oxígeno y el agua, la cual se transportará por la totalidad del cuerpo. Los canales sirven para que se pueda producir el intercambio gaseoso, expulsando el dióxido de carbono por los mismo poros por los que ha entrado el oxígeno; dicha entrada tiene por nombre: peribicunimos.
aparato circulatorio
El aparato circulatorio del orden Helioporacea no es verdadero, ya que la mayoría de funciones se producen en la cavidad gastrovascular.
En la mayoría de octocorales esta cavidad gastrovascular tiene la función de corazón bombeante, con el que se transportan todos los fluidos necesarios, es decir, oxígeno y agua, para los organismos del orden Helioporacea mediante un mecanismos de transporte y los cilios.
Clasificación de Helioporacea
En este apartado se especifica la clasificación del orden Helioporacea. Se van a exponer algunos ejemplos de las especies que se encuentran en este clado. Pinchar las imágenes para más información.
Reproducción de Helioporacea
La reproducción de Helioporacea se basa tanto en la reproducción asexual como sexual. Además, se han encontrado ejemplares de este orden que presentan tanto el sexo masculino como el femenino.
En la reproducción asexual el organismo del orden Helioporacea realiza la gemación, mediante la fisión binaria haciendo que el coral replique su ADN produciendo dos organismos nuevos. Normalmente suelen adherirse y convivir alrededor de la colonia progenitora, creciendo bajo condiciones muy favorables.
Los casos dónde la reproducción es sexual, los organismos Helioporacea son ovíparos ya que la gestación se realiza mediante huevos, teniendo desarrollo indirecto debido al estadío larval de las crías. Una vez los huevos rompen y eclosionan los nuevos organismos, éstos se denominan larvas plánulas que se precipitan a las corrientes de agua; una vez estas larvas crecen, comienza su etapa sésil en la cual encuentran una zona dónde anclarse al sustrato, transformándose a pólipo adulto.
Alimentación de Helioporacea
La alimentación de los organismos pertenecientes al orden Helioporacea se basa en la simbiosis que llevan a cabo con las algas que les rodean, llamadas zooxantelas. Las algas conviven con los pólipos y éstos se benefician de ellas ya que realizan la fotosíntesis, obteniendo nutrientes, ya sean azúcares u oxígeno. Por el contrario, los pólipos son capaces de proporcionarles una cantidad grande de catabolitos a las zooxantelas.
Cuando los organismos Helioporacea no conviven con las zooxantelas tienen que alimentarse exclusivamente de zooplancton o incluso materia orgánica que se encuentre disuelta.
Hábitat de Helioporacea
El hábitat del orden Helioporacea se encuentra delimitado en el ecosistema marino, en las zonas de arrecife, donde residen en las aguas poco profundas, relativamente cerca de las costas, además de sitios con bastante iluminación. La máxima profundidad a la que se encuentran estos organismos helioporacea ha sido en los 51 metros, entorno a 26ºC y 29ºC de temperatura. No obstante, también se localizan en lagunas, sitios protegidos de arrecifes, además de zonas dónde puedan llegar a estar expuestas a un gran oleaje continuo.
Geográficamente se encuentran por la totalidad del océano Indo-Pacífico, cuyas zonas más asiduas son las regiones ecuatoriales de agua en una temperatura elevada de 29ºC.
Origen de helioporacea
El origen de estos animales del orden Helioporacea se estima que pudo originarse en el Cretácico hace 145 millones de años, ya que estudios realizados por la comunidad científica revelan que el primer coral de este clado apareció en dicha época.